Nosotros, como empresa familiar Suiza, nos hemos consagrado al afilado. Desde que, en 1923, Walter SCHNEEBERGER fundó la empresa en Roggwil, hemos trabajado de manera continuada y exitosa para aportar un valor añadido a nuestros clientes. A día de hoy, trabajamos para clientes de prácticamente todos los países industrializados.

Estamos orientados a la prestación de servicios y disponemos de una extensa red de centros de servicio in situ, cerca de nuestros clientes. El hecho de que todos los grupos de desarrollo estén concentrados en la empresa matriz y se lleve a cabo la producción en la propia empresa nos permite llevar a la práctica nuevas ideas con rapidez. Apostamos por conocimientos técnicos propios en muchos campos de especialización, así como también en el desarrollo de nuestro propio software de rectificado, Quinto.